Esta pintura captura la belleza y la majestuosidad de uno de los animales marinos más raros y fascinantes: el narval.
La escena que se presenta es impresionante, el narval nadando entre una multitud de bacalaos. Los narvales comen bacalaos, sin embargo, no usan su "cuerno" para atacar a sus presas. Ni siquiera es un cuerno, sino un diente.
el uso de las tonalidades y texturas de la acuarela, hace que el narval parezca estar nadando en la vida1
Pintora
« El arte es una poderosa herramienta de transformación social, y por ello comparto mi mirada antiespecista desde el amor y la empatía. »